¡Buenos días a todos! Bienvenidos a un nuevo post. Hoy desde Belén Pérez Dental, tu clínica dental de confianza experta en implantes, queremos hablarte de una enfermedad que no es nada grave pero que causa incomodidad; la halitosis o como lo conocemos popularmente «mal aliento».

Halitosis, ¿qué es?
La halitosis como concepto se define como un defecto o enfermedad leve que provoca el mal aliento por deterioro, enfermedad más grave o poca higiene, en general. Este problema genera otros, porque es una señal de que se encuentran bacterias en la boca, que pueden seguir aflorando, e incluso puede ser un aviso de una posible infección.
Causas de la Halitosis
- Enfermedades bucales: Problemas como la gingivitis, periodontitis, caries, úlceras o falta de higiene, son los que normalmente provocan el mal aliento haciendo que esto llegue a ser otro problema que acompañe al primero a causa de la infección o acumulación de residuos, etc.
- Piezas dentales en mal estado por haber un espacio interdental en el que se acumula comida, etc. Es muy importante tener en cuesta esto, saber lo que tienes e ir con cuidado y precaución.
- Amígdalas con criptas: Este concepto define a orificios superficiales en las amígdalas en los que puede acumularse pequeña cantidad de comida que ingerimos, restos de cualquier producto dental incluso.
- Xerostomía: Esto se refiere al déficit de saliva en la boca, a la sensación de boca seca como se conoce vulgarmente. Este líquido bucal ayuda a eliminar restos de la boca, ya que actúa de manera barredora, y ayuda a evitar la halitosis.
- Enfermedades externas a la boca que provocan halitosis, así como problemas gastrointestinales, la menstruación en las mujeres, etc.

Soluciones a la halitosis
- La primera, la más importante, el pilar de todas las soluciones, sea cual sea la causa, es la higiene bucal. El cepillado diario (2 veces al día mínimo) es estrictamente necesario para una salud bucal perfecta. Y la elección y uso de ciertas pastas de dientes también. Se recomienda para el tratamiento resolutivo una pasta de dientes con flúor. Muy relevante el hecho de cepillarse con cautela la lengua y cada diente. A esto podemos añadrle el uso diario del hilo dental para combatir las acumulaciones de alimentos o residuos.
- Beber mucha agua. Esta simple solución puede aportar tanto hidratación que evite la boca seca y desencadene en halitosis; como se encarga también de enjuagar los dientes al beber.
- Gárgaras al lavarse los dientes para evitar restos de alimentos en el espacio interdental, lengua, y sobre todo en las amígdalas.
- Se recomienda hacer uso de los profesionales para una limpieza exhaustiva.
- Es importante el uso además de agentes antimicrobianos como puede ser el lactato de zinc.
Tenemos que aclarar que el tratamiento empieza con la prevención de cada cual y el cuidado de sus dientes. Si esto se dificulta y se entra en principios de halitosis, se recomienda en altas escalas acudir a un profesional para una limpieza completa, y el uso de tratamientos específicos para cada cual. No olvides que nosotros estamos aquí para ti, y no dudes en ponerte en contacto con nosotros y pedir presupuesto sin compromiso. ¡Hasta pronto!